Solvencia económico-financiera en
San Bartolomé de Tirajana.
El Tablero de Maspalomas a, 3 de marzo de 2015.
La situación económica que ha marcado el
punto de inflexión entre el despilfarro y la coherencia en este último lustro
viene motiva por una serie de criterios, que en nuestro municipio, más que nada,
tiene su nuevo rehacer. Muchos lo negaran, otros lo cuestionaran, otras todavía
se estarán justificando ante yo quería pero no pude. Los datos hablan por
sí mismos.
Desde el enfoque de la gestión económica
nuestro municipio vuelve a tener solvencia económica-financiera. Este hecho, que los ciudadanos/as entendemos
con claridad al saber que “con las cuentas saneadas la casa se puede
mantener” es la pieza fundamental para que el engranaje interior y exterior
de la gestión municipal cobre sentido.
A nivel
interior dotar a nuestro municipio de unas infraestructuras con proyección
de futuro para este nuevo tiempo, siglo XXI, conociendo y mejorando barrio a
barrio, es fiel reflejo del impulso en la gestión económica. Son muchos, los
ejemplos, pero cabe destacar en San Fernando de Maspalomas el nuevo Parque Multifuncional de San Fernando que ha cambio la imagen
del lugar para los vecinos/as como para los visitantes que día a día buscan un
complemento al turismo de sol y playa.
La Zona
Comercial Abierta de San Fernando ha modificado y mejorado los usos urbanos
favoreciendo la actividad comercial, las zonas de esparcimiento y de juegos.
Por sus características cobra mayor importancia el sentido de unidad del lugar,
dando la imagen de un pueblo que poco a poco se ha ido consolidando con sus
urbanizaciones.
La reforma del Centro Cultural en El Tablero de Maspalomas, la próxima
rehabilitación de La Plaza de Santísima Trinidad, que fue presentada a sus
vecinos/as en el mismo Centro Cultural.
La Rehabilitación
de la Zona Turística, permite que
tanto visitantes como ciudadanos, veamos la proyección de un espacio que va más
allá de lo meramente municipal. Se ha basado en, invertir, cuidar, mejorar, acondicionar una infraestructura
obsoleta. Hoy, esa rehabilitación da sus frutos, y vemos como desde San Agustín, pasando por Playa del Inglés,
Faro de Maspalomas, Meloneras, etc., tiene una imagen moderna y acorde con
los nuevos tiempos.
Son muchos los datos que se podrían seguir
presentando para ser consciente del cambio que nuestro municipio va generando
en su entorno más inmediato. Pero lo cierto es que un municipio como San
Bartolomé de Tirajana, tiene además una dimensión exterior que engloba su
proyección internacional. En su esencia somos, destino turístico durante los 365 días del
año.
En esa labor, no podemos pasar por alto las actividades
generadas y cofinanciadas desde exposiciones de fotografía, rutas de turismo rural,
festivales, torneos de fútbol internacional, carnavales, etc..
Ciertamente, gestionar San Bartolomé de
Tirajana, implica tener una proyección de nuestro municipio que garantice su
estabilidad económica-financiera y el mantenimiento de los servicios esenciales. La pregunta es, si esto ha sido posible en estos cuatro años, ¿por qué otros antes no lo hicieron?